En este piso rehabilitado íntegramente de 81 m2, en la planta principal de un edificio clásico, construido en 1936, situado en la Dreta de l’Eixample.
La intervención fue completa y se aposto por una nueva distribución de los espacios consiguiendo estancias más amplias y con más luz.
Se diseño una cocina para ser vivida, situándola en un espacio clave para la casa junto al comedor y al salón, los electrodomésticos integrados son de la casa Bosch.
En el mobiliario que se escogió, predominan los materiales naturales y los colores claros, acorde con un estilo nórdico